"Porque donde hay agua, hay vida"

El agua y el diseño.

El agua, como elemento decorativo, ha estado presente desde la antigüedad, reflejada por ejemplo en vetustos jeroglíficos egipcios o en viejas pinturas y reliquias.
 El agua armoniza con todo y lo armoniza todo también. Se adapta a cualquier estilo, ya sea moderno, rústico o clásico y puede ser la protagonista del jardín o ser cómplice de un rincón apartado destinado a la lectura, el silencio, la meditación y el relax.
Será sin duda, el centro de la vida silvestre, ya que coloridas aves e insectos se acercarán en días calurosos para servirse de sus beneficios, llenando de vivacidad y música sectores antes apagados y sombríos.  Los estanques son ideales para reverdecer jardines sin riego ni lluvia, ya que las plantas acuáticas se mantienen verdes durante los meses más cálidos y son también soporte de algunas de las flores más bellas, como los nenúfares y los iris acuáticos, que realzan el paisaje con su amplia gama de colores. Un jardín bien concebido debería tenerlo todo, el fuego en los colores intensos, el aire en el espacio abierto para mirar al cielo, la tierra buena que da soporte y se tiñe de verdes y ocres; y el agua: fuente de vida, vigor y magia.- Acqualeven.